El abuso sobre las mujeres ya no es como en siglos pasados, cuando algunas sociedades les tenían rebajados muchos de sus derechos.
El abuso ha cambiado de cara, de forma, pero sigue siendo abuso. Ahora se le ha convertido en un objeto para satisfacer las demandas mas excitantes del hombre, que sigue siendo machista. En los anuncios de televisión, podemos ver a un tipo de mujer-objeto. Sus ropas dejan ver su desnudez y crean en el hombre, el deseo, la exacerbación por la intimidad física, nublándolos a la sensibilidad por el enamoramiento, el noviazgo y el matrimonio; como pasos previos. La propaganda erótica, mimetiza el producto que se ofrece con la mujer como provocadora de ello, convirtiéndola mentalmente en un accesorio del producto que se ofrece. Esto no queda allí ya que en algunos casos, aunque en menor suceso, no sólo se usa a la mujer como un objeto accesorio a un producto, sino también al hombre, evocando a la nueva filosofía ultramoderna de igualdad entre el hombre y la mujer, hasta en el ser objetos o mercancías.
Rebajárlos mutuamente hasta ser objetos para el placer, es llegar a niveles básicos e instintivos, renunciando a la supremacía del amor, por la impureza de lo banal. Detrás de todo ello, están las personas que se mueven con intereses monetarios, no les importa la moral ni la educación; sólo amansar fortunas. Se mueven mas de 6000 millones de dolares al año para enriquecer a este grupo, dejando como secuela, semillas para las traiciones de pareja, baja autoestima, minimización a las bases del amor verdadero, malos pensamientos, la codicia en el deseo.
No debemos renunciar a dejarnos guiar por la pureza y la rectitud y el amor que debemos mostrar en todo lo que hacemos. Un hogar en donde hay debilidades en esto, hará que los hijos estén listos para esos lobos hambrientos que usted da a sus hijos, termiando en los malévolos negocios de ellos y la destrucción paulatina del propio autorespeto de quienes mas ama.
Mujeres, por favor, hagan algo para no seguir permitiendo que los medios comerciales las sigan maltratando de esa manera, pueden fomentar organizaciones de mujeres donde puedan ayudarse mutuamente, donde puedan compartir sus conocimientos y ayudar a que este mundo se libere de una vez por todas de la aberrante pornografía, de los anuncios donde salen como objetos de comercio, luchar para hacer comprender a las mujeres que viven ociosamente de la prostitución, que están denigrándose como mujeres. Necesitamos que se oigan sus voces en contra de toda esa pobredumbre que amenaza a nuestra juventud, a nuestros hijos y a los propios padres.
No denigren ni hagan sentir como menos, a una mujer que se dedica con devoción a sus hijos y su hogar; no hagan sentir menos a una mujer que decide ser fiel a su marido; no hagan sentir menos, a una mujer que decide llegar digna y virgen a un matrimonio; no abusen de ustedes mismas.
Mujeres, por favor, hagan algo para no seguir permitiendo que los medios comerciales las sigan maltratando de esa manera, pueden fomentar organizaciones de mujeres donde puedan ayudarse mutuamente, donde puedan compartir sus conocimientos y ayudar a que este mundo se libere de una vez por todas de la aberrante pornografía, de los anuncios donde salen como objetos de comercio, luchar para hacer comprender a las mujeres que viven ociosamente de la prostitución, que están denigrándose como mujeres. Necesitamos que se oigan sus voces en contra de toda esa pobredumbre que amenaza a nuestra juventud, a nuestros hijos y a los propios padres.
No denigren ni hagan sentir como menos, a una mujer que se dedica con devoción a sus hijos y su hogar; no hagan sentir menos a una mujer que decide ser fiel a su marido; no hagan sentir menos, a una mujer que decide llegar digna y virgen a un matrimonio; no abusen de ustedes mismas.
Luchen también, por acabar con este abuso que está convirtiendo a las mujeres, en objetos de usar y botar.
Autor : Jorge Raul (socrates1810)
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